La representación contemporánea de la maternidad

Ya tengo una especie de tradición en esto de publicar una entrada con motivo del día de la madre, como puede observarse en entradas anteriores:

La maternidad en el arte: visiones renovadas tras el Post-partum document

La maternidad en el arte II: Madres Fotógrafas contemporáneas

Sally Mann: la madre de la controversia fotográfica (En honor al próximo Día de la madre

Adele Enersen: fotografía “materna” para el gran público

Este año no tengo demasiado tiempo, pero sí que me gustaría añadir otros dos trabajos a la serie ya recogida en posts anteriores. El primero que voy a comentar es el de Aleydis Rispa. Esta artista (y compañera en la UB) tiene un interesantísimo trabajo con técnicas como el fotograma o la cianotipia del que ya he hablado previamente (Aleydis Rispa: la fotografía sin cámara de apocalipsis, bestiarios, caos y extinciones…). De toda su obra, en un día como éste, destacaré unas series en las que la maternidad ocupa un lugar importante y que se titulan Sirenas y Triple Memoria (de esta última ya hablé en otra entrada de este mismo blog con motivo de su exposición en la Galería Esther Monturiol: Aleydis Rispa y Vida Yovanovich: seduciendo a la memoria).

Sirena Louna 04, de la serie Sirenas, Aleydis Rispa, fotogrames, gelatina de plata / photograms, gelatin silver print, 60x50cm

Siguiendo con su habitual trabajo con la huella de lo cotidiano y la memoria colectiva, Rispa nos ofrece en Sirenas unos fotogramas de sus hijas en una clara línea de continuidad de otros trabajos de madres que ficcionan y sueñan a través de las relaciones y los juegos de sus hijos, como los también comentados previamente en este blog de Sally Mann (Sally Mann: la madre de la controversia fotográfica (En honor al próximo Día de la madre).

Captura de pantalla de la web de la galería Esther Montoriol con imágenes de TRIPLE MEMÒRIA, 2013, de Aleydis Rispa

Como ya comenté previamente en este blog: «En estos trabajos, Aleydis Rispa, tras su largo viaje por las profundidades abisales y el espacio exterior, regresa a los espacios de la memoria personal a través de la huella directa de sus seres queridos o de la ropa de los bebés de la familia en un ejercicio absolutamente coherente de evolución hacia lo familiar, lo humano y lo íntimo manteniéndose fiel a los fotogramas, a la huella, al rastro, a sus maravillosas y fascinantes fotografías sin cámara».

IM x NM (1996), de la serie Triple Memòria, 2013. Aleydis Rispa. Gelatina de plata, 40×50 cm.

Otra artista de la que suelo hablar en mis artículos es Ana Alvarez-Errecalde, que recientemente también ha creado unas bellas imágenes con sus hijos, alguna de las cuales ha estado en el ojo de la polémica. Este trabajo de Ana Álvarez-Errecalde, titulado Las cuatro estaciones (2014) está compuesto por las imágenes Anunciación, Sombra, Asentir y Simbiosis, en las que la artista reflexiona sobre su experiencia de la maternidad con honestidad y sinceridad. Una de las imágenes de esta serie, Simbiosis, ha dado mucho que reflexionar y que hablar. En esta fotografía, Álvarez-Errecalde lleva una máscara de un superhéroe: Spiderman, mientras da el pecho a su hijo, que lleva el resto del vestuario del hombre araña. En su web explica de esta imagen: “Mi postura en relación a la maternidad, con la obra SIMBIOSIS se aleja de la idea de SUPERMOM tanto como mi idea de mujer se aleja de la idea de SUPERWOMAN en general. En mi caso no considero la maternidad como un superpoder por encima de l@s hij@s, sino como una relación absolutamente simbiótica, en donde cada ser es completo por sí mismo pero se reinventa y se fortalece en la relación que establece con el/la otr@”.

Simbiosis se publicó en una portada de revista y fue objeto de censura. No es un caso aislado, porque en los últimos años han sido censuradas varias imágenes de madres lactantes en el espacio público mientras, paradójicamente, ese mismo espacio está lleno de imágenes de modelos semidesnudas en grandes dimensiones.

De la web de Ana Alvarez-Errecalde

Este interesante trabajo creo que plantea cuestiones de género y de la propia maternidad contemporáneas muy profundas que aún no tenemos resueltas. Alvarez-Errecalde ofrece una representación fotográfica de la maternidad que se enfrenta a los tabúes contemporáneos que siguen representando este tema con la Virgen María y con estampas que se le asemejen. Las madres del s. XXI reclaman su derecho a otras representaciones posibles, más mundanas, carnales, reales y plurales. La obra de Alvarez-Errecalde demuestra que una estampa que representa a una madre con su hijo puede ser censurada hoy porque algunas mentes consideran promiscuo que un niño sea amamantado por su madre hasta una edad superior a los pocos meses… mientras seguimos encontrando normal y no censurable la publicidad de mujeres con aspecto de niñas anoréxicas muy, muy, muy ligeras de ropa incluso en plena calle o la publicidad de películas con títulos sombríos en los que se trata el tema del maltrato a una jovencita universitaria por parte de un madurito poderoso como la epítome del sexo contemporáneo (Y lo llaman liberación femenina: sin comentarios). Algo no está bien cuando nos ofende ver a un niño alimentándose… y no nos ofenden otras manipulaciones vergonzosas e incluso vergonzantes del cuerpo y la sexualidad de la mujer que llevan a la perpetuación de complejos y traumas atávicos.

Detalle de la web de «Las cuatro estaciones», de Ana Alvarez-Errecalde.

Finalmente, permitidme que termine esta entrada con una referencia a la obra de un artista hombre del que ya he hablado previamente también en este blog (Tatsumi Orimoto: “Art Mama” y “Bread Man”… arte “fluxus” con Alzheimer), pero que creo que encarna a la perfección el espíritu de un día como éste en el que todos deseamos homenajear a nuestras madres. El artista japonés Tatsumi Orimoto es conocido por numerosos motivos ya que fue un miembro de Fluxus, donde fue ayudante de Joseph Beuys y Nam June Paik, ha expuesto en museos como el MOMA de Nueva York y ha participado en las Bienales de Venecia y Sao Paulo con sus ‘performances’. Pero la obra que a mí realmente me interesa es la que realiza a partir del momento en el que su madre es diagnosticada de Alzheimer y él decide ejercer de cuidador 24 horas al día. De esa decisión surgen toda una serie de performances y obras con su madre en un conocido proyecto que tituló “Art Mama”, que representa una peculiar visión sobre el tema de la maternidad, de la enfermedad, de la autorreferencialidad, de la fotografía familiar… y sobre todo de la manera de relacionarse con la alteridad cuando el otro está perdido en los infranqueables laberintos de su propio olvido. En algunas de las imágenes de Orimoto podemos ver a su madre en cajas de cartón o contenedores de materiales de desecho. Estas imágenes representan una profunda crítica a una sociedad consumista y materialista en la que estas personas enfermas y ausentes no son «productivas» y son, con frecuencia, tratadas como elementos inservibles por una sociedad que no ofrece demasiadas alternativas a los cuidadores o a las familias con problemas de dependencia en su seno… Sus cuidadores y ellas mismas sufren, con frecuencia, procesos estigmatizantes, dolorosos y muy complicados a los que se enfrenta la obra de Orimoto.

From the series «Art Mama: In the Big Box». 1997 / 2007. Tatsumi Orimoto. Colour photograph. 60,8 x 75 cm

Y… ¡FELIZ DÍA DE LA MADRE!